¿Salvarse?
En ningún momento
Nadó hacia la orilla.
Su instinto lo arrastró
A aguas profundas.
Allí conoció la miel amelocotonada.
La probó.
Tragó…
Convirtiéndose
No en el ahogado más hermoso del mundo,
Sino en el ahogado más hermoso entre mis muslos.
En ningún momento
Nadó hacia la orilla.
Su instinto lo arrastró
A aguas profundas.
Allí conoció la miel amelocotonada.
La probó.
Tragó…
Convirtiéndose
No en el ahogado más hermoso del mundo,
Sino en el ahogado más hermoso entre mis muslos.