sábado, 19 de septiembre de 2009

2009, sept de 19


Para servirte de colchón agujerado

o como burra del gine

en tus varoniles necesidades.

Y en mis hembriles necesidades:

las que vienen del corazón

y la puta duda,

me callas la puta boca

con un No de lo cojones.

Me harto

me deprimo,

pero no desfallezco.

Sigo el juego de necedades

el juego de la culpable

y se acumula:

el odio de mis penas,

el odio de mis lágrimas,

el odio de mi lengua,

el odio de mis piernas.

Y que vengan las críticas

que canto para ser libre

estimado interlocutor telefónico

y escribo para no suicidarme

estimado lector cibernético...